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38. Lea el relato en cinco minutos tratando de comprender su contenido:

Tejedores del valle de Otavalo

L.Olguín

El primer español, que penetró en el siglo 16 en el valle de Otavalo, que se encuentra en el territorio del Ecuador, prestó atención al arte de tejer de los indios.

Mucho antes de penetrar en este valle los españoles admiraban los tejidos de lana, muy finos, abigarrados y ligeros que vestían los incas nobles. La tela se tejía de la lana de llama, los españoles la mandaban a Europa junto con el oro y la plata.

Los mejores tejidos fueron hechos en el valle de Otavalo. Los tejedores no cambiaron mucho su vida con venir los españoles. Igual que antes tenían que tejer aunque el nuevo poder exigió mucha más producción. Aparecieron los “obrajes” que eran manufacturas primitivas que tenían que buscar las materias primas ellos mismos. Como la producción debía aumentar les empezaron a faltar las llamas y pasaron a utilizar la lana de las ovejas.

Los obrajes pertenecían a la corona española, a los monasterios y a los nobles señores.

Las crónicas de aquellos tiempos llaman a los otavaleños “indios útiles”. No recibían nada por su trabajo, la lana la compraban ellos mismos y lo que tejían era de tal calidad que gustaba no sólo en Quito, capital del Ecuador, sino en Madrid. Por eso no les castigaban los amos. Era una indicación de Madrid.

Los obrajes jugaron un gran papel en la vida del valle de Otavalo y existen hasta hoy día. Claro que los indios no son ahora siervos. Pero el proceso de producción quedó tal como era antes. Una barraca de un piso dividida en varios cuartos muy pequeños. En cada uno hay un torno que se pone en marcha con el pie. Junto al torno, sentado en un taburete bajo, está el tejedor. Un chico hace girar las pedallas. La mujer trae la hilaza teñida. Y poco a poco aparece el tejido: un poncho ornamentado.

Unos trabajan en casa, en el tiempo libre y tardan en hacer un poncho cuatro-cinco meses. Pero los profesionales laboran en el obraje donde el trabajo está dividido y se realiza más rápido.

... En los caminos de Otavalo siempre hay mucha gente. Tienen prisa los hombres de camisa blanca, blancos pantalones cortos y un poncho de color indigo. Las mujeres de largas faldas negras, abigarradas blusas y chales azules caminan y tejen a la vez. Un chal cubre los hombros, otro está anudado en el pecho de modo que a las espaldas se forma algo parecido a un saco, donde es cómodo llevar a un niño o lana. El otavaleño camina de prisa porque nunca pierde tiempo: tiene mucho trabajo.

Como en todas las ciudades pequeñas en Otavalo la vida bulle sólo una vez a la semana: el sábado, día de feria.

Los indios vienen al mercado a la madrugada. Vienen a pie, en camiones, en autobuses.

Ponen sus mercancías en el suelo y se sientan al lado. Unas horas más tarde, cuando el sol empieza a quemar, los compradores desaparecen. Pero los indios se convierten entonces de vendedores en compradores: llega la hora para los vendedores de la lana. Los indios eligen la lana con mucho cuidado examinándola milímetro por melímetro.

Lo comprado lo llevan a sus aldeas: Peguche, Quinchicui. El tejido lo hacen en todo el valle. Pero en esas aldeas tejen todos. En todo caso los hombres de más de los catorce años de edad. Las mujeres, las chicas y los chicos pequeños también están ocupados. Pero el artículo sale sólo de las manos masculinas.

Los menores lavan la lana con el jugo de la cabuya, mejor especie antigua para quitar la grasa. Después la secan, la lavan otra vez, la golpean con palos y vuelven a lavarla en el agua.

Cuando las piernas del chico alcanzan las pedallas, lo ponen a trabajar en un torno viejo.

Las mujeres tienen su trabajo: hilan la lana, la tiñen con el jugo de la nuez o con la pintura química.

Desde el siglo dieciséis ha pasado mucho tiempo. Ha cambiado la situación en el mundo. En el mismo Otavalo han aparecido autobuses pero han cambiado poco las condiciones de trabajo de los tejedores de Otavalo y la maestría sigue la misma y es magnífica y la admira todo el mundo.

Vocabulario

Valle m - долина

Abigarrados adj - строкатий

Llama f - лама

Siervos m pl - раби

Hilaza f teñida - фарбована пряжа

Está anudado - зав’язана

Bullir vi - кипіти

Cabuya f - різновидність агави

Especie f - засіб

Grasa f - жир

39. Empleando las frases del texto, , enumere las etapas de producción de tejidos en Otavalo. Compare el antiguo y el moderno modo de tejer, no sólo en América Latina. Busque en el texto la explicación de la palabra obrajes. ¿De qué palabra proviene? ¿Cómo se traduce al ucraniano? Explique el significado de las palabras internacionales usadas en el relato. Adivine el significado de la palabra el artículo en la frase sacada del texto: “Al final del proceso de trabajo el artículo recibe un magnífico aspecto.”

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