Добавил:
Upload Опубликованный материал нарушает ваши авторские права? Сообщите нам.
Вуз: Предмет: Файл:
Тексти_ДЕК_ісп.doc
Скачиваний:
0
Добавлен:
18.08.2019
Размер:
69.12 Кб
Скачать

En la playa

Esta mañana hace un tiempo magnífico: el sol resplandece en un cielo sereno, sin nubes. El mar, de suaves matices azulados hacia el horizonte y verde-claros hacia las orillas, envía tranquilamente sus olas de blanca espuma en un movimiento sin fin.

En la playa había muchísimos veraneantes. Vestidos de trajes de baño de vivos colores y grandes sombreros de paja, parecen un mar de flores multicolores salpicando un vasto césped al pie del acantilado. Algunos de ellos, acostados perezosamente en la arena, se tuestan a la deslumbradora luz solar. Otros prefieren respirar el aire marino a la sombra de sus tiendas y sillones de playa, o debajo de los grandes parasoles clavados en la arena. Algunos bañistas nadan o juegan a la pelota. No olvidemos a los niños. Para ellos, la playa es un verdadero paraíso: construyen castillos de arena con rompeolas y fosos llenos de agua; preparan con sus moldes metálicos, toda clase de pasteles y tortas que nadie puede comer; recogen conchitas para hacerse collares, corren y dan saltos en las pequeñas olas que se deslizan en la arena de la playa. Otros, más audaces, tratan de nadar o se zambullen en el agua salada del mar para desesperación de sus padres...

Texto №14

En el aeropuerto

El viernes, a las seis de la mañana, el señor Martín, su esposa y su hijo, salieron para el aeropuerto en el autobús especial de la agencia de transportes aéreos. Media hora después estaban en la sala de espera del aeropuerto. Por un poderoso altavoz se anunciaban las llegadas y las salidas de los aviones, así como las respectivas pistas de aterrizaje y despegue.

El señor Martín hojeó un horario en el cual se daban también algunas informaciones acerca de los tipos de aviones y de sus características de vuelo: envergadura, longitud, altura y peso, la carga útil y la velocidad máxima. Un cuarto de hora antes de la salida, se anunció por radio que el avión Bucarest – Constantza aterrizaría en la tercera pista. Los pasajeros, invitados por un empleado del aeródromo, se dirigieron al avión y subieron por la escalerilla móvil. Los Martín tomaron asiento en las plazas que les correspondían. Todos los sitios estaban ocupados. Subió también la tripulación: el comandante de a bordo, un segundo piloto, un radio-telegrafista, un navegante, un mecánico, un sobre-cargo y una azafata. A las siete en punto, el avión despegó. Manolito estaba muy emocionado. Era su primer viaje en avión. La moza de a bordo ofreció a los pasajeros periódicos, revistas, refrescos y ... píldoras contra el mareo.

Texto №15

Por la ciudad

Nuestra capital es una ciudad moderna en continuo desarollo. Tiene grandes edificos y numerosos almacenes no sólo en el centro. Se han erigido o están en curso de construcción barrios enteros con manzanas de casas nuevas y avenidas anchas, reemplazando las casuchas míseras y las callejuelas tortuosas de los antiguos arrabales. A cada paso se encuentran jardines y parques que dan un particular encanto a nuestra ciudad.

En las grandes arterias asfaltadas hay un intenso tráfico de vehílucos de toda clase: automóviles, autobuses, trolebuses, tranvías, motocicletas etc. Por las aceras, los transeuntes circulan en un continuo vaivén.

Juan tiene una cita con un amigo a las 6 de la tarde en la plaza de la Universidad.

Como de costumbre, sale a pie. Su calle desemboca en un gran bulevar de intensa circulación, atravesado por numerosas arterias. Por consiguiente, Juan debe esperar en cada encrucijada para cruzar la calle. Hoy tiene mala suerte. Casi todas las señales luminosas de los faroles de tráfico están en rojo, prohibiendo el paso de los peatones. Su paciencia pasa por pruebas muy duras. El cambio de señales parece durar siglos y el agente de tráfico no está para bromas.